Respecto a los rellenos de la quiché, suelo variar cada vez que la cocino. Es una buena alternativa para agotar todos esos ingredientes que nos sobran en la nevera: ese pimiento verde que lleva dando vueltas varios días, ese poquito de pisto que al final no comimos…

Una de mis opciones favoritas es esta que os presento en este post, la quiché ligera de puerro, calabacín y setas shiitake. Por supuesto, vosotras podéis rellenarla de lo que más os guste.

Es una receta de cabecera. Sobretodo si me seguís por Instagram os habréis dado cuenta de que la cocino absolutamente todas las semanas durante el mealprep del domingo. Es muy fácil de hacer, barata, súper rica y acompañada con una ensalada de hojas verdes me soluciona un par de cenas.

Se puede tomar fría, aunque yo siempre prefiero calentarla un poquito en el microondas antes de comerla. Si espolvoreamos parmesano en polvo en este momento, nos sabrá a gloria.

INGREDIENTES

• 5 huevos
• 5 cucharadas de queso fresco batido
• 1 calabacín mediano
• 1 bandeja de setas shiitake
• 1 puerro

Las cucharadas de queso fresco batido se pueden cambiar por queso cottage light. El relleno también podéis modificarlo a vuestro antojo.

MODO DE PREPARACIÓN

1-. Saltear el puerro en rodajitas, el calabacín en cuadraditos y las setas troceadas hasta que todos los ingredientes estén bien rehogados y tostados.

2-. Batir los huevos, añadir el queso fresco batido e integrar bien ambos hasta crear una mezcla homogénea. A continuación agregar el relleno de verduras y setas.

3-. Disponer la mezcla en un molde engrasado con un poquito de aceite de oliva y hornear en el horno precalentado a 180 grados durante media horita.

Yo utilizo un molde redondo de silicona, pero podéis utilizar el que tengáis a mano.