Esta lasaña de verduras es sin duda mi receta estrella: fue la receta que cociné a mi novio cuando vino a mi casa por primera vez y desde entonces es su plato favorito. Fíjate si estará buena que con lo carnívoro que es, prefiere este plato 100% vegetal a cualquier otra cosa que lleve bacon.

Y es que es infalible, gusta a todo el mundo. De hecho, también la hago mucho cuando viene algún grupo de amigos de visita. La puedes dejar hecha y darle un último golpe de horno antes de servir y es muy saciante, así que acompañándola simplemente con una ensalada de hojas verdes, ya tienes el menú solucionado.

Que el extenso paso a paso no te eche para atrás, es muy sencilla de hacer y el resultado merece muchísimo la pena.

TE GUSTARÁ SÍ…

• Tienes sangre en las venas.

• Te encanta la comida italiana (a quién no? XD) y traicionarías a tu propia familia por un buen plato de pasta.

• Estás buscando una alternativa vegetariana a la lasaña pero todas las que has probado hasta ahora no te convencen.

INGREDIENTES para 4 personas

• Un paquete de placas de lasaña
• 200 ml de salsa de tomate casera
• 300 gr de espinacas frescas
• 1 calabacín
• 1 berenjena
• 2 zanahorias
• 2 puerros
• Una cucharada de mantequilla
• Tres cucharadas de harina
• 1 litro de leche
• Un poco de mozzarella fresca o cualquier queso para gratinar
• Aceite y sal

MODO DE PREPARACIÓN

• Saltea las espinacas frescas en una sartén con un poco de aceite hasta que reduzcan. Lo tendrás que hacer en 2-3 tandas. Escurre y reserva.

• Corta la berenjena en dados y sofríe en una sartén a fuego medio con otro poco de aceite y sal durante 15-20 minutos hasta que se dore bien.

• Haz lo mismo con el calabacín y con la zanahoria.

Para aligerar la receta puedes cocinar estas tres verduras, pero el sofrito queda más sabroso si los cocinas por separado.

• Mezcla la berenjena, el calabacín y la zanahoria y reserva.

• Corta el puerro muy fino y saltea en una sartén con aceite hasta que esté bien pochado, unos 15 minutos. 

• Reserva una cucharada del puerro cocinado para hacer la bechamel e incorpora el resto a la mezcla de verduras de zanahoria, calabacín y berenjena. Reserva.

• Haz la bechamel de puerro. Para ello derrite en una sartén la mantequilla junto al puerro. Remueve y añade la harina. Mézclala y cocínala durante un par de minutos a fuego medio-bajo con cuidado de que la harina no se queme. Ve añadiendo leche poco a poco y mezclando con una varilla constantemente hasta que se haga bien la bechamel. Añade sal al gusto y reserva.

La bechamel no tiene que estar tan espesa como para hacer unas croquetas, así que no te preocupes si te queda un poco líquida.

• Precalienta el horno a 180 grados. Si tus placas de lasaña son precocidas ponlas en agua caliente o cuécelas si son normales (en todo caso, sigue las instrucciones del fabricante).

• Es el momento de formar el relleno de las capas. Mezcla las espinacas con cuatro cucharadas de bechamel de puerro y reserva.

• Divide el sofrito de verduras en tres bowls diferentes. Añade 4 cucharadas de bechamel a uno de ellos y reserva. A los restantes, agrégales dos cucharadas de salsa de tomate y 2 de bechamel. Reserva.

• En una fuente de horno extiende dos cucharadas de salsa de tomate. Pon dos placas de lasaña encima y la primera capa da la lasaña: las espinacas con bechamel.

• Pon otro par de placas de lasaña y esta vez haz una segunda capa con el sofrito de verduras con tomate. 

• La tercera capa llevará dos placas de lasaña y el sofrito de verduras con bechamel.

• La cuarta capa llevará dos placas de lasaña y el sofrito de verduras con tomate.

• Por último, haz la capa final con dos placas de lasaña y vierte el bechamel sobrante por encima. Pon el queso por encima y cocínala 30 minutos al horno a 180 grados.

• Sírvela opcionalmente con un poco de queso parmesano rallado por encima y a comer!